En el Jardín Zenea se encontraban, los huertos, el panteón y de siete capillas del Convento de San Francisco, que en la actualidad alberga al Museo Regional.
En el siglo XVIII se le conoció como Plaza del Recreo o Plaza de Abajo, pero fue a partir de 1870 que el gobernador del estado, Benito Santos Zenea, le dio la forma, trazo y tamaño que ahora luce.
La fuente que existe en su centro, substituyó a una que originalmente fue dedicada al dios Neptuno y que se dice, fue utilizada en 1867 para fabricar cañones durante el sitio de la ciudad.
El elegante quiosco de estilo afrancesado corresponde a la época porfiriana, razón por la cual no se pudo construir al centro de la plaza. Esta plaza llevó el nombre del General Álvaro Obregón después de la Revolución, pero fue en épocas recientes que se le dio su nombre actual, Jardín Zenea, en honor al gobernador que la construyó.