El primer teatro lírico que se construyó en la república. Se debe a la iniciativa del coronel Francisco de Paula Toro, de quien lleva el nombre desde 1879. Fue creación de Teodoro Journot, ingeniero francés que purgaba una condena en la cárcel local. Abrió sus puertas el 15 de septiembre de 1834 y su arquitectura corresponde a las limpias líneas del neoclásico, aunque en dos ocasiones ha sido objeto de reconstrucciones: 1914 y 1990.