Debido a las múltiples inundaciones que sufrió la ciudad fue necesario levantar el cuerpo varias veces. Hoy en día se conserva solo una imagen del Cristo de Burgos que fue donada por el Conde de Valenciana y varios cuadros, obras de pintores mexicanos del siglo XVIII.
La explanada frente al Templo de San Diego de Alcalá sirve diariamente como punto de encuentro para las Tunas Guanajuatenses (estudiantinas) antes de partir a su tradicional recorrido musical por los callejones más famosos de la ciudad.
El templo de San Diego de Alcalá se localiza frente al Jardín de la Unión y a un costado del Teatro Juárez.