En el espacio que antes ocupaba el Centro Ceremonial Xochimilco, la rotonda se construye con el objeto rendir homenaje a Fernando Celada, Quirino Mendoza, Juan Badiano, Francisco Goitia y José Farías Galindo.
Su arquitectura es moderna con jardines diseñados para el descanso, donde destaca un muro alto que ostenta el texto de la Cédula Real otorgada por Felipe II Rey de España, donde se nombra a Xochimilco Ciudad Noble y Leal.